Homenajes

Hotel Voice, Verano 2023

Nosotros queremos recordar todos nuestros hermanos y hermanas de la Unión que han fallecido, su arduo trabajo, y sus almas inspiradoras.

Delson Campbell – The Tuscany Hotel

Nuestra Unión lamenta el fallecimiento de Delson Campbell, quien trabajó en el Westin Times Square por 15 años antes de trabajar los últimos años como oficial de seguridad en el Tuscany Hotel.

Kevin Mingle, compañero de trabajo y amigo de Delson en el Westin Times Square, dijo que “Delson fue una de las primeras personas que me entrenó, era un tipo fuerte que podía trabajar más que nadie y me enseñó mucho sobre la seguridad de un hotel. Era un tipo muy gracioso y una buena persona.” La esposa de Delson, Sandra, compartió que “era un gran trabajador. Él siempre era generoso con su tiempo y nunca llegaba tarde al trabajo.”

Originario de Kingston, Jamaica, a Delson se lo recuerda por su estilo, ya que siempre se vistió muy prolija y meticulosamente. A él le encantaba mirar películas viejas y disfrutaba de un episodio de CSI cada noche. 

Lo extrañarán mucho sus compañeros de trabajo, su esposa Sandra, sus cuatro hijos y sus dos hijastros.

Carlos Alvarez – Sheraton NY Times Square

A nuestra Unión le entristece anunciar el fallecimiento de Carlos Alvarez, quien trabajó en el Sheraton NY Times Square como camarero de banquetes y fue miembro de la Unión por 25 años.

Originario de Cuba, Carlos adoraba todo lo referido a su país, en particular la cultura y música. Su familia lo recuerda como un hombre amable, cariñoso y divertido a quien le encantaba bailar y cantar cada vez que podía. Su hija Amalia compartió que Carlos amaba a su familia y adoraba pasar tiempo con su nieta Rebecca. 

Sus compañeros del Sheraton recuerdan a Carlos como un gran miembro del equipo. Carlos Salazar, un compañero camarero de banquetes en el Sheraton NY Times Square, compartió que “Carlos era un gran trabajador y uno de mis mejores amigos aquí. Él siempre cuidó su trabajo y era un gran hombre.”

A Carlos lo sobreviven su esposa Elsa, su hija Amalia, su nieta Rebecca y su marido Zack. La familia agradece a todos sus queridos compañeros de trabajo del Sheraton y a la Unión por todo. 

Tony Zaccardi – Carlyle y Princeton Club

Nuestra Unión lamenta el fallecimiento de Tony Zaccardi, quien trabajó como camarero de banquetes en el Carlyle por 41 años y en el Princeton Club por 52. Tony fue delegado en ambos talleres por décadas y sirvió en la Asamblea de Delegados de Local 6 por un largo tiempo.

Tony nació en Quaglietta, Italia, en 1944. Cuando tenía 13 años, Tony se mudó a la Ciudad de Nueva York con su familia, donde vivió por muchos años antes de regresar a Italia a casarse con su novia desde la infancia, Maria. Juntos, tienen una hija, Annamaria, quien recuerda a Tony como “un padre increíble. Honesto, amable y comprensivo. Entendía el significado de la amistad y la lealtad. Todos los que lo conocían lo amaban y respetaban.” Tony adoraba pasar tiempo con su familia y amigos, sacar a pasear al perro de su nieta y mirar fútbol — su equipo favorito era el Napoli.

Tony consideraba a su trabajo su segundo hogar y a sus compañeros de trabajo su segunda familia. Ellos lo recuerdan como un hombre bondadoso, un generoso miembro del equipo y un verdadero hombre de la Unión. 

“Él era muy directo con la gerencia, siempre luchó por lo que era justo. Iba por encima de las expectativas por nosotros y por los huéspedes. Él era un gran amigo mío”, dijo Benito Ocampo, camarero de banquetes en el Carlyle.

John Milonas, otro compañero y amigo del Carlyle, dijo, “Tony dejaba un legado adonde fuera. Era cariñoso, un gran trabajador — una gran persona con gran carácter. Su fallecimiento es una pérdida para la sociedad.” 

A Tony lo extrañará mucho nuestra Unión y todos los que lo conocían, especialmente su esposa Maria, hija Annamaria y dos nietas, Anna Lauren y Samantha. 

Pedro Torres – Mandarin Oriental

Nuestra Unión lamenta el fallecimiento de Pedro Torres, quien fue mayordomo en el Mandarin Oriental por 20 años. La hija de Pedro, Carmen, recordó cariñosamente que “a mi papá le importaba mucho asegurarse de que su familia tuviera todo lo que necesitaba, incluso si eso significaba sacrificar los fines de semana.” Según sus compañeros de trabajo, era un trabajador duro y siempre quería ayudar a quien lo necesitara.

En casa, a Pedro lo recuerdan por cocinar con su familia y ser maestro de sus hijos. Originario de Puerto Rico, él les enseñó a sus tres hijos a hablar inglés, a hacer matemática, a cocinar y a manejarse en el sistema de transporte de Nueva York. Pedro y su esposa María celebraron su 40mo aniversario en mayo y bailaron su canción favorita, Suavemente de Elvis Crespo. Pedro adoraba la música, particularmente la salsa, y tocaba la guitarra y el cuatro. La gente lo conocía por tocar en parrandas, una tradición musical de Puerto Rico en época de navidad. Con sus amigos, Pedro amaba hacer bromas y hablar de baseball. Era un fanático de los Mets, aunque el resto de su familia fueran fanáticos de los Yankees, y siempre usaba su sombrero de los Mets, sin importar la temporada. 

A Pedro lo sobreviven su esposa María, sus tres hijos, Pedro Jr., Dinorah y Carmen, y sus cuatro nietas, quienes lo extrañarán muchísimo. 

Larry McNeil – Antiguo Gerente Comercial del Local 56 y Secretario de Actas de HTC

La Unión lamenta el fallecimiento de Larry McNeil, quien fue durante muchos años Gerente Comercial del Local 56 y Secretario de Actas de HTC. Antes de jubilarse el año pasado, Larry sirvió diligentemente a la Unión durante 30 años, y durante ese tiempo cofundó nuestro Comité de Salud y Seguridad con el Gerente Comercial de los Locales 1 y 43, Bob Lyons, y sirvió como Presidente de la Junta de Resolución de Querellas desde 1996 hasta 2021. En estas funciones, Larry se enfocó en proteger la seguridad laboral y el bienestar de innumerables miembros y ayudó a establecer medidas de seguridad duraderas que protegen a los miembros hasta el día de hoy. En particular, desempeñó un papel importante en el desarrollo de una ley municipal que garantiza la calidad del agua en los hoteles y ayudó a garantizar normas de salud y seguridad sin precedentes en la renovación de nuestro contrato marco para toda la ciudad que tuvo lugar en 2006.

El Presidente Rich Maroko dijo que: "En los 20 años que lo conocí, vi a Larry trabajar incansablemente para garantizar que los hoteles fueran lugares seguros y saludables, no solo para los miembros de HTC, sino para todos los trabajadores y huéspedes de los hoteles de la ciudad. Dedicó gran parte de su vida a fortalecer nuestra Unión y a proteger a nuestros miembros, y por ello todos le debemos un gran agradecimiento. Su jubilación el año pasado fue bien merecida, y es una pena que haya fallecido tan pronto".

“Larry era una persona maravillosa y un gran Gerente Comercial, pero también era mucho más. Era una tornavoz con la que podías intercambiar pensamientos. Larry podía ver las cosas desde muchos ángulos diferentes y daba sus consejos libremente a cualquiera que se lo pidiera. También fue mentor de muchos miembros y compañeros de trabajo, incluido yo mismo”, compartió Bob Lyons, antiguamente un Gerente Comercial. “Larry siempre hizo todo lo posible para ayudar a los miembros con todo tipo de problemas, incluido el desempleo y las cuestiones médicas, y pudo resolver la mayoría de ellos porque fue capaz de pensar de manera innovadora. La mayoría de sus delegados pudieron resolver problemas a nivel de hotel, y eso se debe al tiempo que Larry les dedicó. Trabajé muy de cerca con Larry durante 18 años y aprendí mucho de él. Las relaciones y contactos que cultivó y compartió conmigo fueron de gran ayuda para resolver los problemas. Sus miembros y compañeros de trabajo, y especialmente yo, lo extrañaremos mucho”.

Larry era conocido por su carisma, su chispa y sus conocimientos en casi todos los temas. Sirvió en la Inteligencia Militar en Alemania como sargento del ejército estadounidense, y se llevó consigo una pasión por el aprendizaje que le duró toda la vida. Inicialmente obtuvo una licenciatura en Fordham y posteriormente cursó un máster en la Universidad George Washington, y nunca le faltaba un libro entre las manos. Larry era también fanático de Stephen King, superfan de Star Trek, aficionado al cine y ávido pescador. Su amabilidad, sabiduría e impacto en las vidas de quienes lo rodeaban no se olvidarán, y su familia y amigos, a los que siempre dio prioridad, le echarán profundamente de menos.

A Larry lo sobreviven Regina, su amada esposa durante 39 años, su hija Rita, su nieto Liam, su madre Ann y sus hermanos John y Stephen, entre otros miembros de su extensa familia.