Contratos nuevos, vidas nuevas

Escuche a cinco de nuestros miembros más recientes sobre cómo han cambiado sus vidas desde que ganaron un contrato de la Unión este año.

"He trabajado en hoteles desde 2016. He estado tratando de sumarme a la Unión desde ese entonces. Este año, finalmente, pude hacerlo. Les he estado mostrando mi contrato a toda la gente que conozco que trabaja en lugares fuera de la Unión y diciéndoles que vengan y traten de sumarse a la Unión.

Nuestro aumento de salarios fue inmenso. Todo el mundo decía “¡Guau!” Pero el seguro de salud fue lo más grande para mí. Yo estaba en el seguro de salud del hotel, tuve una pequeña cirugía y me mandaron una cuenta enorme. Todavía estoy tratando de disputarla. Pero ahora que estoy en el plan de la Unión fui al Centro de Salud y tuve una cita dental y un chequeo completo, todo gratis."

"La Unión entró unos meses despues que abriera el casino. Todos dijimos que sí — queríamos la Unión.

Cuando recibimos el contrato, en general, todo mejoró. Más tiempo libre, servicios legales prepagos, el seguro médico es fenomenal... y el aumento. Esa fue una gran diferencia, cerca de $400 adicionales por mes después de los impuestos. Soy dueño de mi casa, por lo cual siempre hay proyectos para hacer. Pude rehacer mi garage — convertirlo en una “cueva” para mí.

Tengo 61 años y este seguro de salud es el mejor que he tenido en mi vida. He hablado con compañeros de trabajo que han tenido procedimientos médicos grandes este año a costos bajos o ningún costo.

Además del salario, los beneficios — el contrato nos da un sentido de seguridad laboral. Si tú trabajas en un lugar sin una Unión, no hay nadie que controle a la gerencia. Es fácil ser despedido. Ahora, soy delegado, y si la gerencia quiere despedir a alguien, tengo que estar en la sala. Entonces contactamos al Agente de Negocios y averiguamos si fue una causa justa. En mi corto tiempo aquí, ya he visto a la Unión traer personas de vuelta por haber sido despedidas injustamente. Eso es importante."

"Yo comencé en el Night Hotel hace cinco años. Había estado en este país por tres meses buscando trabajo y no podía encontrar nada. Conocí a alguien en el tren que me contó sobre el trabajo, tuve una entrevista y lo recibí. Comencé a $13,50 por hora. El plan de seguro que me ofrecían costaba $200 por semana. Nadie que trabajara ahí podía pagarlo. Teníamos que recibir seguro del gobierno.

Teníamos una cuota de 18 habitaciones. A veces teníamos 15 checkouts. Si no terminábamos a tiempo, nos teníamos que quedar más tarde — y nunca se nos pagaba por las horas adicionales. Los gerentes nos faltaban el respeto, nos gritaban, nos apuraban. Tuve que tomar un segundo trabajo limpiando casas para poder pagar mi renta. Esta era la opresión que vivíamos antes del contrato de la Unión.

Eventualmente, nos llenamos de valor y contactamos a HTC.

Conseguimos el contrato al año siguiente. Ese fue el mejor sentimiento, recibir esta cosa, este contrato, que te avala, que aumenta la paga, que te da el mejor seguro de salud — que dice que ahora eres libre.

Ahora me voy cuando mi turno acaba o recibo paga por tiempo adicional. Ahora le puedo decir al gerente que me pague lo que me deben o llamaré a la Unión. Ya no somos animales para ellos, somos humanos. Todo se ha revertido. Todo es diferente.

Renuncié a mi segundo trabajo. Tengo más tiempo para pasar con mis hijas. Tengo tres adolescentes. Dicen cosas como ¡mamá, quiero ir de compras! Por mucho tiempo eso no era posible. Ahora sí lo es. Les puedo dar lo que quieren. Puedo pagar la renta, puedo ahorrar para la jubilación. Estoy bien. My familia está bien."

"Comencé a trabajar en el Park Hyatt en 2014. Pagaba $17 por hora, sin vacaciones y la paga no era suficiente para que pudiéramos pagar un seguro médico. Los gerentes eran racistas hacia nosotros, muy demandantes. Si nos quejábamos, tomaban represalias.

Dos años después, el resto del hotel se sumó a la Unión. Vimos que habían conseguido un cambio drástico en beneficios y en cómo se los trataba. Vimos que la Unión podía reivindicar nuestros derechos como humanos, como trabajadores.

Entonces, mis compañeros de trabajo y yo contactamos a la Unión. Teníamos que firmar tarjetas y tomó mucho tiempo porque la gente tenía miedo. Tenían miedo de que la gerencia nos descubriera y nos despidiera.

Conseguimos el contrato en agosto y todo ha mejorado. La paga básicamente se ha duplicado. Ahora tenemos seguro médico y dental gratuito. Se sintió como si un peso se nos hubiera ido de encima. No lo podíamos creer — fue un momento de shock cuando vimos la paga, los beneficios, todo. Yo tenía lágrimas en los ojos.

Voy a poder pagar por una casa para mi familia ahora. Finalmente podré empezar a ahorrar para eso."