Feliz retiro a nuestros jubilados
“Sumarme a una Unión”, dice la Organizadora de HTC Wendy Baranello, “fue el momento en el que un trabajo se convirtió en realidad, en lugar de sólo trabajar según la voluntad de otro.” Después de años de trabajar según la voluntad de la gerencia de Tavern on the Green, Wendy luchó para hacer a su trabajo de Camarera de Comida “real”, y, junto con sus compañeros de trabajo, ganó un contrato de HTC en 1989. Continuó como miembro de HTC por 31 años y 15 más como organizadora de HTC. Se jubiló en diciembre de 2022, dejando atrás muchos miembros y personal de la Unión que inspiraron su activismo en ella.
Wendy traza su propia conciencia laboral al emergente movimiento por derechos de las mujeres de la década de los ’70. Como presidenta de su grupo de mujeres en William Patterson College, Wendy recuerda “pensaba que las mujeres debían tener los mismos derechos que los hombres y que ciertamente debían pagarnos lo mismo que a los hombres, que las mujeres no éramos solamente cuidadoras y amas de casa y soportes para los hombres en nuestras vidas, que éramos personas por nosotras mismas.”
La directora de movilización de HTC Arisha Sierra-Blas se sumó a la Unión en 2010 como pasante y recuerda, “Wendy me inspiró a dedicar mi vida al movimiento laboral no solamente como organizadora, sino como mujer –cuando la vi, vi una mujer fuerte y poderosa.”
Para financiar su título de actuación, Wendy tomó una serie de trabajos de camarera y eventualmente comenzó a trabajar en Tavern on the Green en 1978. Ella recuerda que el dueño Warner LeRoy modeló Tavern en “el Palacio de Versalles”, completo con “habitaciones cubiertas de cristal con vistas al parque”, “todo tipo de artefactos de todas partes del mundo”, e “invitados famosos: actores de Broadway, estrellas de cine, directores.” Pero a pesar de su opulencia, no había un vestuario para mujeres. “No se pueden imaginar lo que era eso.”
Wendy y sus compañeros de trabajo estaban representados por una serie de uniones débiles y poco eficaces en Tavern y, como resultado, se enfrentaban a condiciones laborales inaceptables, salarios por debajo de $6/hora y despidos abruptos. Ella escuchó sobre HTC por compañeros de trabajo que tenían trabajos de banquete de la Unión en otros hoteles. “Nos dijeron ‘HTC realmente sabe cómo defender a los trabajadores.’ Y así comenzó.”
Durante los siguientes dos años, a pesar de que su carrera actoral sería puesta en pausa indefinidamente, Wendy se convirtió en una estrella en un drama importante. Cada mañana, caminaba al trabajo pasando una línea de rompe-huelgas reclutados por la gerencia para intimidar a empleados para que no hicieran huelga. Ella recuerda, “miles de camareros hacían fila desde la calle 59 hasta el parque.” Mientras tanto, sus supervisores organizaban “reuniones de audiencia cautiva, donde yo escondía grabadores en mis bolsillos para la Unión.” Incluso después de que HTC ganara reconocimiento como Unión, ella y sus compañeros delegados fueron despedidos por “participación en una pausa laboral ilegal.” Cuando la lucha finalmente fue ganada en 1989, Wendy recuerda que “la dignidad y el respeto fueron las cosas más importantes que queríamos cuando nos organizamos. Las obtuvimos.”
En los años siguientes, Wendy se hizo conocida por la inigualable atención personalizada que le prestaba a todas las personas que organizaban con ella. La cajera de recepción del Redbury y organizadora de HTC Njomza Dubovci dice “Wendy me enseñó a escuchar, porque cuando tú escuchas, aprendes.” El camarero de banquetes del Pierre y organizador de HEAT Antonio Codita dice “Wendy me mostró que organizar no es sólo una misión, no es sólo una tarea, es sobre las personas. HTC no es sólo miles de trabajadores, somos antes que nada personas.”
Reflexionando sobre sus años finales organizando antes de su jubilación, Wendy dice que “la pandemia fue una verdadera prueba. Es como estar en huelga: no te das cuenta cuando estás en el medio, pero cuando la terminas ves que hicimos todo lo que pudimos para mantenernos en contacto con nuestra gente, para mantener a nuestros trabajadores a flote. Nos fue excelente en el examen.” Ella dice que se ha sorprendido positivamente en llamadas telefónicas con miembros en los últimos meses, cuando muchos han dicho “Yo te conozco, tú eres Wendy. Claro que seré voluntario para defender a la Unión. Tú me ayudaste, tú me escuchaste cuando necesité a mi Unión durante la pandemia.”
“Ha sido un privilegio inesperado”, dice Wendy, “estar ahí para la gente.”
