Kamal Ahmed, Millenium One UN Plaza

Nos apena grandemente el fallecimiento de Kamal Ahmed, que fue mesero de banquetes en el hotel Millenium Hilton One UN Plaza y miembro de la Unión por cerca de 40 años.

Kamal vino a los Estados Unidos desde Bangladesh hace 40 años. Se le recuerda como un esposo y padre amoroso y un líder comunitario. En el momento de su muerte, Kamal estaba sirviendo su segundo mandato como presidente de la sociedad bangladesí de la Ciudad de Nueva York.

Su muerte suscitó un desbordamiento de condolencias y apoyo por parte de sus compañeros de trabajo, bangladesí-americanos y la comunidad en general. Innumerables mensajes por escrito a su familia recuentan los recuerdos de Kamal que tiene la gente como un líder amable y fuerte, en quién los demás confiaban en momentos de crisis. Su trabajo incansable en la defensa política y social para ayudar a los inmigrantes bangladesí en un nuevo país fue destacado por mucho a quienes Kamal había ayudado a través de su vida. Incluso dos días antes de que fuese ingresado en el hospital, Kamal se encargó de los arreglos fúnebres de cinco familias bangladesí que habían perdido seres queridos debido al COVID-19.

Su compañero mesero de banquetes Ashraful Haque recuerda que “Kamal era una de las mejores personas en nuestra comunidad. Era un verdadero líder, que ayudó a nuestra comunidad bangladesí durante mucho tiempo; siempre estaba disponible para aquellos que buscaban ayuda.”

Azimur Rahman, mesero de banquetes y miembro de HTC que sirve de fideicomisario en el consejo de la sociedad bangladesí de la Ciudad de Nueva York, agregó que “a través de su éxito en su carrera profesional en el hotel, y su tiempo trabajando en una firma legal, el Sr. Kamal Ahmed siempre pudo ser un apoyo constante para todo el que necesitara ayuda financiera o personal en la comunidad. Como comunidad, todos lloramos la pérdida de un líder prominente. Su legado y su trabajo benéfico no se olvidarán jamás.”

El compañero de trabajo de Kamal, el mesero de banquetes y delegado de la Unión Samir Tolba, dijo que “Trabajé con Kamal durante 30 años. Él era un buen trabajador. Lo vamos a echar de menos.”

Su hija Romana recuerda a Kamal como un padre amoroso y un pilar de su comunidad. “Él ayudaba a todo el mundo. Si tenía $1, y uno necesitaba $200, él encontraba la manera de conseguirle los $200. Por eso es que la gente lo llamaba “paraguas” porque él protegía a la gente en los días de lluvia. Para mí, él fue un padre maravilloso, antes de que yo le pidiera cualquier cosa, él ya estaba listo para dármela. Parecía que podía leerme la mente.”

Su esposa Afsari Ahmed también recuerda a Kamal como un hombre generoso y bondadoso, “Mi esposo siempre ayudaba a todos. Era un esposo y padre amoroso.”

A Kamal lo sobreviven su esposa, su hijo, su hija, cinco hermanos y cinco hermanas.